miércoles, 3 de noviembre de 2010

Mentiras repetidas en Estados Unidos, en torno a Obama




A raíz del escrito de Ricardo Rocha, denominado “¿La ignorancia como meta? y que circulamos por este medio virtual, el empresario colombiano Ricardo Lequerica amplió el panorama e hizo algunos comentarios que son muy pertinentes y que vale la pena circular por el RADAR.
Es bueno que aprovechemos esta tecnología para que los ciudadanos del mundo se enteren cómo se están moviendo  la economía, la política y el pensamiento de los dirigentes, empresarios, funcionarios y la gente del común en torno al gobierno del presidente Barack Obama, porque, indudablemente, lo que ocurre en Estados Unidos tiene repercusiones a nivel global.
Ricardo Lequerica mencionó una secta que odia a los negros, que la hemos conocido en películas, donde se demuestra que el grupo de blancos desprecia a la gente de color oscuro.
Aquí en Colombia, estamos presenciando una novela, “La Pola” protagonizada por Carolina Ramírez y dirigida por Sergio Cabrera, donde los españoles consideraban a los esclavos como seres inferiores. Y eso ha ocurrido en el mundo, desde sus inicios.
La abuela de Obama, fue maltratada y vilipendiada… pero no solo su abuela, sino las abuelas de muchos norteamericanos… ¿Eso podrá cambiar?
Sería una buena estrategia y un excelente negocio para todos, que el mundo cambiara para bien. ¡El odio nos puede destruir, si no actuamos!

LuisEmilioRadaC
Pd:

Para: LuisEmilioRadaC
De: Ricardo Lequerica
Enviado: miércoles 03 de noviembre de 2010 09:00:13 a.m.


 
Apreciado Luis Emilio:
Me pareció muy ilustrativo el artículo de Ricardo Rocha, sin embargo, creo que a él le faltaron algunas precisiones:


La primera, es el uso de los medios en contra de los Demócratas y especialmente del Presidente Obama.
Siempre recuerdo una celebre frase, "repetir una mentira mil veces puede parecer una verdad", esto es lo que se ha hecho en Estados Unidos.
Desde la victoria de Obama a la Presidencia se inicio un ataque frontal a través de los medios más importantes, se han dicho de todo tipo de mentiras, diciéndolas seriamente y repitiéndolas una y mil veces hasta el punto que el débil de mente (léase ciudadano común) se la cree como una verdad.
Por ejemplo, "Obama es musulmán", "Obama es socialista", "Los Demócratas van a convertir al país, en un país comunista", "Obama llevó al país al desempleo", "Obama metió al país en dos guerras", "Los Demócratas no han querido tramitar la ley de inmigración", etc.
La realidad ha sido otra, Obama y los Demócratas han presentado y logrado dos leyes prioritarias para solucionar problemas comunes, la de salud y la de control a los bancos. Ambas leyes con grandes enemigos por intereses económicos: los Bancos y las empresas de Seguros.

Sin embargo, los medios se han dedicado a confundir al ciudadano del común, que aún no han entendido la magnitud de las nuevas leyes.
Y el gran pecado de Obama, además de su inteligencia y capacidad de liderazgo, es tener coloración oscura. Para ellos, Obama es "negro", no es medio blanco ni medio negro. En pocas palabras, algunos líderes americanos han sacado el K.K.K. que tienen por dentro… es decir, el racismo aún sobrevive en ellos.

Igualmente, es bueno mencionar la necesaria presión que el actual gobierno americano le ha puesto a Israel, lo cual ha traído como consecuencias los ataques del poderoso "Lobby Judío" en USA, que también tiene gran control de medios y los utilizan como instrumento de choque.
Esto es un ejemplo de como el "Cuarto Poder" es utilizado para controlar un país.
Cordialmente,
RICARDO A. LEQUERICA
lequerica@ieee.org


EFE - WASHINGTON 19.08.2010
El número de estadounidenses que creen, erróneamente, que su presidente, Barack Obama, es musulmán ha aumentado hasta alcanzar el 18%, mientras que sólo un tercio, el 34%, sabe que es cristiano, según un sondeo publicado ampliamente por los medios de comunicación de EE.UU. este jueves.
La encuesta fue llevada a cabo por el Pew Research Center entre el 21 de julio y el 5 de agosto, es decir, antes de que Obama levantara el viernes pasado una polémica al apoyar el derecho de los musulmanes a construir una mezquita cerca del recinto en Nueva York que antes albergaba las torres gemelas, derrumbadas en el doble atentado del 11-S.
En octubre de 2008 sólo el 12% de los encuestados creía que Obama era musulmán, frente al 51% que sabía que era cristiano.
Por otra parte, en el nuevo sondeo, sólo el 44% de las personas consultadas dan el "aprobado" a la actuación de Obama como presidente de la nación, mientras que el 41% le asigna un "desaprobado".
En marzo de 2009, sólo el 26% de los encuestados le daban el "desaprobado" a su presidente.
Los colaboradores de Obama en la Casa Blanca "se mostraron decepcionados ante los resultados del nuevo sondeo del Pew Center", según el Washington Post.
El New York Times, al informar de los resultados de la encuesta recordó que la confusión sobre la confesión religiosa del presidente Obama se suma a los persistentes rumores, difundidos sobre todo en círculos derechistas, de que Obama nació fuera de Estados Unidos, lo cual, de ser cierto, lo inhabilitaría para la jefatura del Estado.



 Ku Klux Klan
Ku Klux Klan (KKK) es el nombre que han adoptado varias organizaciones en los Estados Unidos creadas desde el siglo XIX que promueven principalmente la xenofobia, así como la supremacía de la raza blanca, homofobia, el antisemitismo, racismo, anticomunismo, y el anticatolicismo. Con frecuencia, estas organizaciones han recurrido al terrorismo, la violencia y actos intimidatorios como la quema de cruces, para oprimir a sus víctimas.
La primera encarnación del Klan fue fundada a finales de 1865 por veteranos del Ejército de los Estados Confederados de América que, después de la Guerra de Secesión, quisieron resistirse a la Reconstrucción. La organización adoptó rápidamente métodos violentos para conseguir sus fines. Sin embargo, hubo una reacción que en poco tiempo llevó a la organización al declive, pues las élites sureñas veían al Klan como un pretexto para que las tropas federales estuvieran activas en los Estados del Sur. El KKK fue formalmente disuelto en 1870 por el Presidente republicano Ulysses S. Grant, a través del Acta de derechos civiles de 1871 (conocida como "El Acta Ku-Klux Klan").


En 1915 se fundó una nueva asociación que utilizaba el mismo nombre, inspirada por el poder que tenían los medios de comunicación de masas. La película El nacimiento de una nación, y el antisemitismo mostrado en las crónicas periodísticas del juicio y linchamiento del presunto asesino Leo Frank, contribuyeron a dicha inspiración. El segundo KKK fue una organización más formal, con membresía registrada y con una estructura estatal y nacional. El número de miembros llegó a ser de 4 a 5 millones.[1] La popularidad del Klan comenzó a caer en la Gran depresión de 1929, y durante la Segunda Guerra Mundial, ya que algunos miembros destacados del Klan protagonizaron escándalos por apoyar a la Alemania nazi.


Desde entonces, varias agrupaciones diferentes han utilizado el nombre, incluyendo a las que se oponían al Acta de Derechos Civiles, y a la de segregación en las décadas de 1950 y 1960. Algunos miembros de estas organizaciones llegaron a ser condenados por diversos crímenes. Aunque docenas de organizaciones emplean hoy todo o parte del nombre en sus títulos, la membresía real se estima en unos cuantos miles. Estos grupos, con operaciones separadas en pequeñas unidades aisladas, son considerados grupos de odio extremo. El KKK moderno ha sido repudiado por los medios de comunicación de masas y líderes políticos y religiosos de Estados Unidos.

¿La ignorancia como meta?, por Ricardo Rocha



Lo que está ocurriendo en Estados Unidos, en estos momentos, por Ricardo Rocha...

Parece que no hay marcha atrás.
Vuelve a presentarse un cambio en las tendencias políticas norteamericanas.
El pueblo se pronunció ahora, a favor del Partido Republicano.
Ricardo Rocha, nos explica porqué…

LuisEmilioRadaC
Pd:

Estados Unidos, noviembre 2-2010
¿La Ignorancia como meta?
Por Ricardo Rocha
Esta noche cuando aun no han reportado todos los precintos, y hay Estados en donde no han cerrado las urnas, todo indica que el Partido Demócrata tiene entre manos una derrota por administrar.
En cierto modo es una derrota construida por la dirección del partido y el otro componente es la corta memoria de los pueblos, en lo que  parece ser un atributo universal a las masas.

Cuando el Presidente Obama fue electo con un movimiento que vino desde abajo e involucró a los jóvenes y a las mujeres, dos sectores poblacionales casi siempre aislados del acontecer político, la jefatura del Partido Demócrata se ocupó de cosas trascendentales como las importantes reformas prometidas en la campaña.

Pero olvidaron continuar el contacto con la base, del mismo modo como lo hicieron durante la campana de 2008. El ciudadano pensó que bastaba con haber votado y que el resto vendría por simple gravedad.
Algunos directivos fueron advertidos de lo que podría ocurrir si se desactivaba el sistema de comunicación con el pueblo, pero la respuesta fue el silencio.


Y el hombre de la calle no tiene ni el tiempo ni la paciencia para averiguar si la razón por la cual ha estado desempleado dos años después de haber ayudado a elegir un gobierno, es que el problema se originó en el gobierno anterior.
No, ese hombre necesita una respuesta aquí y ahora, porque su situación financiera no da espera, porque probablemente él es uno de los miles que perdieron su empleo, su vivienda y algunos hasta sus familias, a través de un divorcio.
La memoria del pueblo
También hay que contar que el Partido Republicano ha contado con la corta memoria de este pueblo. Fue ese mismo partido que en ocho años hundió la economía nacional y exportó los empleos a China, porque para los donantes de esa colectividad era mejor establecer sus factorías en China en donde pagan salarios de miseria y vender sus productos en el mercado local como marca americana.
Pero el hombre de la calle no tiene tiempo para saber o aprender eso.
  
Racismo subterráneo
El otro elemento es el racismo subterráneo -y a veces no tan subterráneo- que aun permanece en sectores de opinión y especialmente en la televisión y la radio. Presentadores que diariamente rinden homenaje a la ignorancia como algo deseable. Ser un oficial electo o aspirar a serlo y tener un título de una de las universidades prestigiosas del país, es un motivo de desdén en esta nueva horda que considera que la educación es mala para el pueblo.

El discurso que hemos escuchado es el ataque a quienes han ido a las mejores universidades, porque son elitistas. Y este cargo se les endilga sin ningún reato al Presidente Obama y a su mujer.

Quienes hacen tales afirmaciones pasan por alto que fueron sus antecesores blancos, muchos de ellos sus parientes que en el pasado tiranizaron a los negros primero como esclavos y después mediante las leyes de apartheid. Y hablan de elitismo de la pareja presidencial sin pararse a pensar que él es negro y su esposa, Michelle, es nieta de esclavos. Sí, los mismos que construyeron la Casa Blanca.

Pero los pueblos tienen el problema de aspirar a la simplicidad en política y eso no es posible, porque esa es una actividad compleja por cuanto lidia con la vida y el comportamiento de los conglomerados humanos. 



Muchos de los que hoy votaron contra el gobierno acogotados por la angustia y esperanzados en que los nuevos políticos van a cumplir su palabra de ayudarlos están embarcados para un viaje a ninguna parte, porque éstos no han venido para salvar a los trabajadores.
Su elección ha sido posible mediante el esfuerzo financiero del gran capital que resiente la reforma a la actividad financiera, la ley de seguros de salud y porque no quieren perder las gabelas de las exenciones tributarias que hacen que Bill Gates o Warren Buffett paguen menos impuestos que un electricista que gana 60 mil dólares anuales.

Pero para eso se hicieron las elecciones y parece que los Republicanos se encaminan hacia una victoria considerable que puede hacer más difícil la ejecución de las políticas de los Demócratas.

Así que a los hispanos que votaron Republicano hay que advertirles que pueden empezar por decir adiós a la posibilidad de una reforma a la ley de inmigración que haga posible la legalización de los 12 millones de ilegales que viven en el país.

La ignorancia como meta apetecible en una sociedad es una locura y solo es posible en una sociedad como esta, en la cual los medios de comunicación han abdicado al deber de examinar cuidadosamente las propuestas públicas. Tal vez porque hay medios, particularmente radio y tv., que dedican su esfuerzo a promover una visión idílica de la falta de información, mientras los presentadores de los mismos, se ponen millones anualmente por esa actividad incomprensible para alguien medianamente inteligente.